Lluvias ligeras en la Amazonía durante el fin de semana fueron puntuales
Durante el fin de semana del 21 y 22 de septiembre, la región Amazónica de Ecuador registró ligeras lluvias, aunque las precipitaciones fueron puntuales y de baja intensidad.
Guillermo Flores, analista de pronóstico del Instituto Nacional de Hidrología y Meteorología (Inamhi), explicó que estas lluvias, aunque más abundantes que las registradas en la capital, no fueron lo suficientemente significativas como para incrementar los caudales de los ríos ni afectar considerablemente la región.
“En la Amazonía algo llovió estos dos días, igual muy ligero, siguen bajos los niveles normales acumulados de precipitación”, indicó Flores.
A pesar de las lluvias registradas, los niveles de precipitación en la región Amazónica continúan por debajo de los promedios habituales para esta época del año.
Esta situación ha generado cierta preocupación entre las comunidades locales, que dependen de las lluvias para mantener el caudal de los ríos y garantizar el suministro de agua en la zona.
En cuanto a las condiciones meteorológicas para los próximos días, Flores señaló que se espera un ingreso considerable de radiación solar, lo que traerá temperaturas altas durante el transcurso de la semana.
“Esta semana va a ingresar bastante radiación, se esperan temperaturas altas nuevamente en la Amazonía”, explicó el experto. Esto significa que la región Amazónica experimentará días cálidos y soleados, lo que podría agravar las condiciones de sequía en algunas zonas.
Sin embargo, al igual que en la región andina, las probabilidades de lluvia en la Amazonía podrían aumentar a partir del jueves 26 y viernes 27 de septiembre. Flores confirmó que estas precipitaciones podrían extenderse hasta la primera semana de octubre.
A pesar de que las lluvias en la Amazonía durante el fin de semana fueron ligeramente superiores a las registradas en Quito, Flores aclaró que no fueron lo suficientemente fuertes como para tener un impacto significativo en los caudales de los ríos de la región.
La región Amazónica, conocida por sus elevados niveles de humedad y frecuentes lluvias, ha experimentado una disminución en sus acumulados de precipitación en lo que va del mes de septiembre.
Esta situación causa preocupación en los sectores agrícolas y las comunidades ribereñas, que dependen de las lluvias para el riego y el suministro de agua.