OPINIóN

Editorial: Luisa plantea la corrupción como política de Estado


Luisa González se descontroló en el tramo final de la campaña. Es evidente que la cadena de errores cometidos por su entorno desmorona su candidatura, a tal punto que cayó en la desesperación de regresar a ver e invitar a Jan Tópic.

Luisa González se descontroló en el tramo final de la campaña. Es evidente que la cadena de errores cometidos por su entorno desmorona su candidatura, a tal punto que cayó en la desesperación de regresar a ver e invitar a Jan Tópic a formar parte de su gobierno, con lo cual institucionalizará la corrupción en su administración, en caso de ganar. Jan Tópic y sus empresas fueron sancionadas por el Banco Interamericano de Desarrollo, por detectar corrupción en sus prácticas empresariales. El Comité de Sanciones del Grupo BID determinó que las empresas de Jan Tomislav Tópic Feraud incurrieron en prácticas corruptas, cuya consecuencia es que la familia Tópic y el grupo empresarial de los Tópic, incluyendo a Jan Tópic Feraud, queden excluidos de las líneas de crédito y financiamiento del multilateral, hasta diciembre de 2035. Las empresas corruptas, según el BID, son: Cable Andino S. A. Corpandino, con domicilio fiscal en Ecuador; Cable Andino Inc., con domicilio fiscal en las Bahamas; Cable Andino USA Inc., con domicilio fiscal en Estados Unidos; además de Megadatos S. A. y Telconet S. A., ambas con domicilio fiscal en Ecuador; además de las personas naturales Jan Tomislav Tópic Feraud y Marion Tomislav Tópic Granados. En un pronunciamiento en redes sociales, Tommy Tópic, representante de Telconet, el 7 de enero de este año admitió que la sanción es de índole reputacional. Jan Tópic guarda silencio sobre este tema.

Además, en Ecuador, las empresas de la familia Tópic son mencionadas en el caso Odebrecht, pese a que no existe sanción sobre ellos; y, el Estado extinguió el título habilitante del cable submarino porque la Agencia de Regulación de Telecomunicaciones, ARCOTEL, detectó irregularidades en el proceso de adjudicación.

Lo cierto es que a esa persona es a la que acude Luisa González. Quizá lo haya hecho porque su equipo asesor así lo sugirió y esa sugerencia llega, posiblemente, tras haber valorado el nombre de Jan Tópic para fines electorales, pues, aunque no haya podido estar en la papeleta, es posible que una parte de la población se sienta representado por la propuesta que hace dos años dio el señor Tópic en materia de seguridad. Por eso, la candidata González le asignó el Ministerio del Interior a una persona declarada corrupta por el BID.