OPINIóN

Editorial: La OEA deja sin piso a la RC


La Misión de Observadores de la Organización de Estados Americanos emitió su informe definitivo sobre el balotaje en Ecuador, el sábado anterior, en el que reconoce la aprobación de los resultados numéricos de la segunda vuelta.

La Misión de Observadores de la Organización de Estados Americanos emitió su informe definitivo sobre el balotaje en Ecuador, el sábado anterior, en el que reconoce la aprobación de los resultados numéricos de la segunda vuelta. De hecho, afirma que las cifras presentadas por el Consejo Nacional Electoral “son coincidentes con la muestra recabada por la Misión en terreno”. El informe es contundente: No hubo fraude.

De hecho, la OEA, a través de su informe, precisa que “si bien se observó en casos aislados que la tinta en la papeleta llegaba a manchar al ser doblada, también observó que, en casi la totalidad de los casos, este inconveniente fue resuelto en la mesa frente a representantes de las dos fórmulas presidenciales, donde la clara voluntad del votante fue respetada. La MOE/OEA resalta que existieron muy pocos casos observados de anulación de votos por esta razón y ratifica que dicha situación pudo haber afectado a las dos candidaturas por igual y no presenció la existencia de una intención premeditada y sistemática de anular votos de una opción en contienda”.

El sustento madre del correísmo de su objeción era el informe de la Misión de Observadores Electorales de la Organización de Estados Americanos, sin embargo, con este informe definitivo, queda de forma automática sin piso la rabieta de Rafael Correa y sus secuaces. Es momento de voltear la página y mirar hacia el futuro. Pero Luisa González sigue en negación. En la pública radio Pichincha, de la prefectura de esa provincia, aparece para hablar ahora de encuestas e insiste con abrir las urnas.

Ecuador atraviesa momentos difíciles, no solo por la ola de violencia que no cesa, sino, además, por los estragos en la Costa a causa del invierno, que se suma con fenómenos naturales como el sismo del fin de semana anterior; y en lugar de aprovechar su liderazgo y capacidad de movilización para ejecutar acciones solidarias en beneficio de sectores desposeídos, el correísmo insiste en montar una mentira en la que solo ellos creen, pero es su derecho, y hay que respetarlo, aunque esto implique una pérdida de tiempo innecesaria.

Mientras tanto, el presidente Daniel Noboa, con su nutrida delegación, siguen de gira internacional. Esperemos pronto ver resultados positivos sobre este viaje por Europa y Asia.