OPINIóN

Editorial: Nuevos asambleístas


Hoy, los asambleístas orenses reciben sus credenciales, para ser reconocidos de forma oficial como legisladores de esta jurisdicción y tomar posesión la próxima semana en el seno de la nueva Asamblea Nacional.

Hoy, los asambleístas orenses reciben sus credenciales, para ser reconocidos de forma oficial como legisladores de esta jurisdicción y tomar posesión la próxima semana en el seno de la nueva Asamblea Nacional. El 14 de mayo será la primera sesión de la nueva legislatura, conforme lo dispone la Constitución: 10 días antes de la posesión del presidente de la República, que es el 24 de mayo del año en el que fue elegido.

El gobierno, que tendrá la mayor bancada, busca consolidar una mayoría absoluta de 76 asambleístas. Ya han anunciado que dialogarán con todos los bloques. Si el presidente, Daniel Noboa, quiere tener éxito en su gestión, primero, antes de la primera sesión del pleno, debe definir si convocará o no a una Asamblea Constituyente, es decir, debe decidir si disolverá o no la Legislatura. Si en efecto ese es el camino que tomará, pues bienvenidos sean todos los sectores, pero si esta es la Asamblea que se quedará cuatro años, pues debería analizar con sigilo a quiénes va a invitar a robustecer su bancada. En estos momentos políticos de Liga2 y de Metástasis, en el que se graban conversaciones y reuniones ultrasecretas, en los que no hay como confiar en absolutamente nadie, el primer mandatario debe tener sumo cuidado con quiénes decide acoger.

A lo largo de la historia política del Ecuador, las traiciones y rupturas se han convertido en la moneda de cambio habitual para conformar mayorías. Ejemplos hay por montones desde el veslasquismo, pasando por el regreso a la democracia, la ruptura y división de organizaciones políticas, el surgimiento de nuevos partidos, todo, a partir de traiciones. Es irremediablemente cotidiano que los nuevos líderes políticos convivan con la traición, lo difícil será determinar en qué momento llegará, pero para el efecto, el presidente Noboa debe estar preparado.

Al margen del lado del que quieran aliarse los legisladores, deben tener claro que primero está el país y el Ecuador requiere temas mínimos de entendimiento de toda la clase política, como por ejemplo, mejorar el sistema de salud, educación y salvar al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y las iniciativas de todos los actores deben ir orientadas hacia ese objetivo. No podemos perder más tiempo y la nueva Asamblea tiene esa obligación con la patria.