OPINIóN

Editorial: Urge transparencia


Existe un hastío entre los ecuatorianos por la imperante corrupción que se registra en la función pública. Cada día crece más la sensación de que en este país la meritocracia no existe.

Existe un hastío entre los ecuatorianos por la imperante corrupción que se registra en la función pública. Cada día crece más la sensación de que en este país la meritocracia no existe. Los ganadores de los concursos se los conoce antes de las postulaciones. Los adjudicatarios de los contratos también. Y esta corrupción es a todo nivel. Turnos para una cita médica o un servicio público como, por ejemplo, para la obtención de una cédula, una licencia o una revisión vehicular, puede ser obtenida hasta en el mismo día, siempre y cuando, el usuario pague una coima.

En este país, el ciudadano promedio es quien sufre las consecuencias de la ola de corrupción, porque a ellos es a quien al final del día le pasan la factura. Son los más pobres de este país, los que no tienen “palancas”, a quienes les suben los impuestos para recuperar el dinero que otros se robaron, o a quienes les pretenden elevar los años de trabajo para acceder a las jubilaciones. Por eso, estos ciudadanos están hastiados de la corrupción y son ellos los que confiaron en Daniel Noboa, quien, de su lado, les prometió ser un político distinto, porque fue él quien rechazó los pactos políticos, porque dijo que “esas coaliciones a mí me suenan a amarre”. ¿Dónde quedó ese Daniel Noboa?

Durante la ceremonia en la que recibió su credencial de Presidente de la República, enfatizó que no habrá impunidad para nadie, sin embargo, llama la atención por qué no revela con quién o quiénes llegó a un acuerdo. ¿Por qué los ecuatorianos debemos enterarnos por la prensa que el próximo presidente de la Asamblea será Henry Kronfle gracias a un pacto PSC-RC-ADN, en lugar de que sean los líderes de estas tres organizaciones políticas quienes lo digan de forma abierta?, ¿por qué Jaime Nebot, Rafael Correa y Daniel Noboa lo esconden?, ¿qué ocultan?, ¿qué hay a cambio de entregarle al PSC la Presidencia de la Asamblea, pese a que su partido apenas consiguió 14 curules? Noboa debe recordar que de los tres líderes, es el único por quien los ecuatorianos votaron el pasado 15 de octubre. ¿Está consciente que su capital político está en juego? Los otros dos están de salida, por tanto, no tienen nada que perder.