SALUD

Trastornos alimentarios: cómo detectarlos y prevenirlos




En los trastornos de conducta alimentaria, el apoyo de la familia y de profesionales es muy importante para la recuperación. En este contexto, la psicóloga indica que algunas estrategias de abordaje son:

Profesionales ad hoc: siempre buscar ayuda de parte de profesionales capacitados en el tema, como un médico nutriólogo, psiquiatra, nutricionista o psicólogo especialista, con enfoque integral y multidisciplinario.

Informarse a fondo: aprender sobre este tipo de trastornos, para ofrecer un apoyo asertivo. Evitar hacer comentarios negativos sobre la comida o el peso.

Comer en familia: tener espacios de comida en familia, al menos una al día, donde se pueda compartir día a día. Para un paciente con trastorno alimentario, suele ser muy angustiante comer, por lo que acompañar este proceso puede ser de gran ayuda.

Fomentar un ambiente de apoyo: la comprensión es fundamental, por lo que es importante crear espacios de diálogo, validar sus sentimientos y atender a las preocupaciones, ya que son aspectos claves para promover un ambiente de apoyo.

Evitar comentarios sobre el cuerpo: estos pueden tener un impacto significativo en el autoestima y percepción de sí mismos, pudiendo afectar directamente en la salud mental de la persona. “Familia o amigos pueden realizar comentarios inadecuados y juicios sobre la apariencia de ellos, por lo que es importante evitar frases tales como, ‘has subido de peso este último tiempo’, ‘delgada te ves mejor, deberías seguir así”, aclara la experta.

Tipos de tratamientos

En cuanto a los tratamientos disponibles, la experta asegura que depende del tipo de trastorno y los síntomas específicos de cada paciente. “En la actualidad, se aborda generalmente con terapia psicológica especializada en trastornos de la conducta alimentaria más tratamiento farmacológico, ante lo que es importante realizar una evaluación acabada de la sintomatología presentada. Al ser un tratamiento multidisciplinario, es imprescindible la evaluación psiquiátrica, ya que en muchos pacientes la farmacoterapia puede ser un gran aliado para tratar comorbilidades como la depresión, pensamientos obsesivos y ansiedad”.