CANTONAL

Yacuviña tendrá su Centro de Interpretación Arqueológica


PACCHA. Karina Torres, prefecta encargada de El Oro y Bismark Ruilova Reyes, alcalde del cantón Atahualpa, firmaron el convenio respectivo.



Rescatar y conservar el patrimonio cultural e histórico de las ruinas de Yacuviña, ubicadas en el cantón Atahualpa, es el principal objetivo que motiva la construcción del Centro de Interpretación Arqueológica del lugar y para lo cual la prefectura firmó un convenio con la Municipalidad. La obra forma parte del plan de reactivación económica de El Oro impulsada por el organismo provincial.

CONVENIO

La suscripción para la ejecución de la obra se llevó a efecto en el coliseo cerrado de deportes de la ciudad de Paccha y fue presidido por la prefecta encargada, Karina Torres, que junto al alcalde, Bismark Ruilova Reyes, cerraron este nuevo compromiso de apoyo al turismo del cantón Atahualpa y la provincia en general.

CORREDOR TURÍSTICO EN

LA PARTE ALTA DE EL ORO

“Una obra que se complementará con una carretera de ingreso de cinco kilómetros y que además formará parte del gran corredor turístico de la parte alta, donde, además, ustedes saben consta la obra del teleférico”, afirmó Torres en su intervención.

El complejo arqueológico Yacuviña guarda un gran acervo cultural e histórico, que revela costumbres y tradiciones de Cañaris e Incas, civilizaciones que habitaron en este lugar.

OBRA IMPULSA DESARROLLO

Según Bismark Ruilova, alcalde de Atahualpa, la obra impulsará enormemente el desarrollo no sólo de su cantón, sino de toda la provincia y será la antesala a grandes emprendimientos que generarán fuentes de empleo, mejoramiento y la calidad de vida de la gente.

El complejo se encuentra ubicada a tan solo 15 minutos de la ciudad de Paccha, vía San Juan de Cerro Azul –Pasaje. Su nombre está compuesto por dos palabras de origen quichua: Yacu, que significa agua o río; y, Viña, que es para siempre. La combinación de ambas se traduce como “agua eterna”.

Además, se remonta al año 1500, momento histórico en que los hermanos Huáscar y Atahualpa, como herederos del Tahuantinsuyo, se disputaban su territorio.

Una ciudad perdida que ahora busca demostrar al mundo entero.